Represa Xalala

En las distantes tierras altas de Guatemala, miles de indígenas están luchando para proteger sus hogares y sus tierras de la Represa Xalala, un proyecto de 180 MW que se construiría en el río Chixoy, río abajo de la existente Represa de Chixoy. El Gobierno quiere construir el proyecto para suministrar electricidad a Guatemala y al vecino México, pero las comunidades, muchas de las cuales sufrieron terribles atrocidades durante la guerra civil de la década de 1980, se resisten firmemente.

La Represa de Xalala desplazaría a más de 2.000 personas e impactaría los medios de subsistencia de 8.000 agricultores Maya-Qechí. Comunidades en las provincias de Ixcán, Quiché, Alta Verapaz y Uspantán se verían afectadas por la represa.

En 2007, las comunidades organizaron un referéndum en su área local para medir el apoyo al proyecto. Casi el 90% de las personas en la zona dijo que "no" a la presa. Sin embargo, el gobierno se ha negado a reconocer como obligatoria la votación porque el proyecto se considera una prioridad nacional.

En noviembre de 2008, el gobierno ofreció el proyecto a inversores privados, pero no recibió una sola oferta. Los inversores desistieron a realizar ofertas, debido a la oposición de la comunidad y la crisis financiera mundial.

Un informe preparado por la Iniciativa de Copenhague para Centroamérica y México pide al gobierno guatemalteco reconocer los derechos de las comunidades al consentimiento libre, previo e informado, y preparar una evaluación de los impactos ambientales, que incluya las consecuencias ambientales, sociales, económicos y culturales del proyecto.

Internacional de Ríos está trabajando con los Puentes de Paz para apoyar a las comunidades afectadas en su campaña, y espera poder coordinar un estudio sobre las opciones de energía alternativa para Guatemala.